Los trastornos del neurodesarrollo abarcan un grupo heterogéneo de patologías (trastornos del espectro autista, dificultades del lenguaje, retrasos generalizados del desarrollo) que afectan diferentes dominios del desarrollo. En la actualidad las investigaciones científicas han demostrado un incremento en el número de casos diagnosticados. Asimismo, los trabajos actuales afirman que las intervenciones a temprana edad mejoran el pronóstico y la calidad de vida del niño y su familia. La posibilidad de hacer una evaluación interdisciplinaria nos permite llegar a un diagnóstico del desarrollo preciso y adecuar según el perfil individual de cada niño el tratamiento más efectivo.
Los niños que presentan desafíos en el desarrollo deben ser derivados para una evaluación especializada e interdisciplinaria a fin de poder realizar un diagnóstico oportuno. Dicho proceso debe incluir una consulta médica especializada, evaluación del funcionamiento en las diversas áreas del desarrollo incluyendo la socioemocional, evaluación neurolingüística y evaluación de la motricidad y las individualidades del procesamiento sensorial.
La evaluación nos permite arribar a un perfil funcional del desarrollo y diagnóstico temprano, lo que permite impactar en un mejor pronóstico: CI más alto, mejores habilidades socio-comunicacionales y adaptativas; adecuada inclusión educativa; una mejor calidad de vida para el niño y la familia y el abordaje de posibles comorbilidades.
Se ha demostrado el rol fundamental de la neuroplasticidad en edades tempranas es un factor determinante durante las intervenciones tempranas.
El objetivo principal es realizar un diagnóstico acertado, de forma temprana, a través de una evaluación interdisciplinaria bajo la perspectiva evolutiva.
Asimismo, se intentará detectar enfermedades orgánicas asociadas, evaluar las necesidades de la familia y realizar las recomendaciones terapéuticas individualizadas.
Los niños con sospecha diagnóstica de trastorno del desarrollo, podrán ser derivados para realizar las evaluaciones diagnósticas por sus pediatras de cabecera, neuropediatra, profesionales del equipo terapéutico tratante.
Es ideal que la evaluación sea efectuada en niños menores de 36 meses, sin embargo el proceso diagnóstico podrá ser realizado a cualquier edad.
Se trata de una evaluación clínica interdisciplinaria especializada, coordinada por un neurólogo infantil y/o un psiquiatra infantil. El equipo se encuentra conformado por: neuropsicología, neurolinguística, terapia ocupacional.
Los aspectos principales que se evaluarán durante el desarrollo de la Clínica son:
El diagnóstico se basará en el juicio clínico especializado, teniendo en cuenta toda la información sobre antecedentes médicos, desarrollo neuromadurativo, síntomas observados y referidos por los padres, y las medidas de desempeño cognitivo, del lenguaje y adaptativo obtenidas a partir de las pruebas estandarizadas.
Luego de finalizado el módulo de evaluación, se mantendrá una entrevista de devolución con los padres y se entregarán los informes correspondientes.
Los pacientes podrán realizar reevaluaciones de acuerdo al criterio de su médico tratante.